lunes, 3 de octubre de 2011

El masaje de Laura


No es que yo sea una experta en el tema del masaje del bebé, ni mucho menos, pero cuando Laura nació fui a un curso de postparto y masaje del bebé, que la verdad me encantó y os recomiendo que si teneis oportunidad lo hagais, yo lo hice porque estaba impartido por las matronas de mi centro de salud que son todas majísimas, un encanto de personas, y además se podía acudir con los bebés, ya que la primera parte de cada clase estaba dirigida a las mamás y la segunda parte de la clase era sobre el masaje de los bebés. La verdad es que creo que es muy beneficioso darle masajes a los bebés ya que te ayuda a establecer un vínculo afectivo, hay una comunicación entre el bebé y la mamá o el papá, y se crea un momento de paz y felicidad maravilloso, y algunos masajes sirven también para aliviarles si tienen aires o cólicos. Eso sí, para dárselo hay que buscar, un momento del día de relajación, paz, tranquilidad de ambos, porque si no es un momento así, lo más probable es que le transmitamos nerviosísmo e inquietud al bebé y éste acabe llorando, claro.

Bueno, pues este fin de semana me ha pasado algo muy curioso, después del baño a Laura siempre desde que nació le pongo cremita, y a veces le hago masajes que aprendí en el curso de postparto, también le hago caricias y a veces cosquillas, suele ser un momento muy divertido, pues bien el sábado cuando le estaba poniendo crema por la tripa va y me dice (bueno un poco peor pronunciado por su lengua de trapo, claro) " mami un te quiero", y yo no sabía al principio a qué se refería y le dí un besito y le dije que la quería mucho, pero ella no se refería eso y me lo volvió a repetir "mami un te quiero" poniéndose la mano en su tripa y dando vueltas restregándose la crema y entonces me acordé de que había uno de los masajes que era como si le hicieras una U al revés alrededor del ombligo en el sentido de las agujas del reloj, y que mi matrona nos decía "cuando se lo deis si quereis podeis hacerlo pronuncionando despacio "Te-Quie-ro" a la vez que deslizas la mano en forma de U al revés", pues bien se lo hice y me dijo "sí, oto te quiero"...yo me quedé alucinada ¿es posible que se acordase? hacía mucho tiempo, yo diría que muchos muchos meses que no le hacía ese masaje...en fin los bebés y los niños son así, no dejan nunca de sorprendernos, por lo menos a mí.

Besitos,

Marta




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